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Esta labor de sembrar la semilla espiritual requiere fe, amor y esfuerzo, como todas las grandes obras. Requiere también mucha preparación: estudio y análisis, meditar sobre ello, y lo más importante, tratar de vivir Su Doctrina. Debemos demostrar con nuestros actos, con nuestra forma de vida, que hemos comprendido, que hemos asimilado Su Doctrina y estamos dispuestos a vivirla. El sembrador debe alejar de sí todo lo que sea hipocresía. Debe ser auténtico, dedicado, congruente. No debe hacer diferencias entre poderosos e indigentes pues debe aprender a mirar al espíritu antes que a la materia. Este humilde labriego te invita a tí, hermano, a ser sembrador. No nos toca a nosotros transformar o redimir a la Humanidad, porque ésa es tarea divina, no humana. Sencillamente, humildemente, depositaremos la semilla en el corazón de nuestros hermanos, con amor, con paciencia, con ejemplo. ________________________________________________________ «¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§« ¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯ - ¿Nos estamos comunicando con Dios? Platiqué hace poco con una amiga, hermana en la Doctrina, que tiene muchos años de edad y de conocer esta bendita enseñanza; me relataba emocionada cuando asistió, el 31 de diciembre de 1950, a la última Cátedra, dada a través del entendimiento humano, donde Dios, nuestro Padre, se despedía de esa forma de comunicación. Recordaba ella el llanto de las personas al escuchar las palabras de despedida, porque quizá pensaban: ¿Cómo sería la nueva forma de comunicación? ¿Podrían alcanzar la comunicación de espíritu a Espíritu? Le pregunté si ella, quien a diferencia de otros siguió el camino de la obediencia a los mandatos del Señor, había experimentado ya la comunicación de espíritu a Espíritu, y me respondió que no sabía, que tal vez no era lo suficientemente inteligente para haberlo logrado. De inmediato, surgió la pregunta: "Hermana, ¿Quien es hijo de Dios: tu espíritu, o la materia que le dió por vestimenta? ¿Quién es el que fue creado a Su imagen y semejanza?" Si Dios es Espíritu como nos explicara el Divino Maestro, es justo y necesario que se comunique con Sus hijos, los espíritus, y ¿cómo lo hará? ¿cuál será el idioma en el que puedan comunicarse el hijo y el Padre? El amor. El amor que es elevación, luz, camino. Dejemos que fluya ese amor que está en nuestro corazón; ése será el camino que nos conduzca hasta Él y entonces sí, hablémosle, sin palabras rebuscadas, sin textos preparados por otros a los que consideramos más preparados; hablémosle desde el fondo de nuestro corazón, como debe hablar un hijo con su Padre. Y entonces ocurrirá el prodigio, que no serán cosas que podamos decirle o pensamientos que debamos formular, ya que ¿qué podemos decirle que Él ignore? El prodigio será que lo escuchemos, que seamos capaces de recibir en nuestra mente y en nuestro corazon Sus sabios consejos, Sus enseñanzas y hasta Sus cátedras. ________________________________________________________ «¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§« ¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯ - El camino de la felicidad. En este mundo que vivimos, pareciera que todos corremos en busca de algo que resulta inalcanzable, algo que nos permita ser felices, pero que tal vez no se sepa en forma cabal, que es realmente, ya que la gente, por lo general, no lo logra. Para unos es dinero, poder, para otros puede ser fama, notoriedad, pero en ambos casos las personas, al lograrlo, se dan cuenta de que se sienten vacías, de que son profundamente infelices. Hay un fenómeno común en nuestros días y es el de las personas muy jóvenes con casos agudos de depresión, que puede ser el mal de esta época. Tendemos a olvidar que esta vida material no es todo. Que es un instante, en el camino sin fin de nuestro espíritu. Que esta vida material es una etapa más, una maravillosa oportunidad para evolucionar espiritualmente y ser mejores cada día. El que es padre o madre, sea lo mejor: el que es hijo, deberá dar honor a sus padres, siendo mejor que lo que ellos pudieron ser; el que es amigo, el que es hermano, que lo sea con amor, verdaderamente. Cada quien tiene una cruz, y muchas veces no sabemos si la llevamos a cuestas, o es ella la que nos sostiene. Recordemos las palabras de Jesús al joven que quería ir tras Sus pasos: - Toma tu cruz y sígueme- ________________________________________________________ «¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§«¤»¥«¤»§« ¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯¯ Amados hermanos: Oremos hermanados, por toda la Humanidad, enviando nuestro amor a toda la Creación. Tu hermano en el Señor El Pequeño Labriego Todas las citas pertenecen al Libro de la Vida Verdadera (El Tercer Testamento) *** ejemplares anteriores http://144000.net/boletin ***