El amor de Dios es inalterable
Inmutable, eterno y perfecto, por eso quienes crean que el Espíritu Divino puede verse poseído por la ira y la injusticia, cometen grave error; esas flaquezas sólo son concebibles en los seres humanos cuando les falta la elevación del espíritu y el dominio sobre las pasiones. Ahí tenéis el fruto de la mala interpretación que se ha dado a las escrituras de los tiempos pasados, cuyo lenguaje divino no ha sido encontrado todavía en el fondo del lenguaje humano con que fueron escritas las revelaciones y las profecías. Muchos van hablando del fin del mundo, del juicio final. de la muerte y del infierno, sin saber un átomo de la verdad.
Todo es bendito por Mí, a toda hora, en todo instante. De Mí no ha brotado, ni brotará maldición o abominación alguna. Unos dicen: Dios está en los cielos, otros: que habita en el mas allá; pero no saben lo que dicen ni conocen, lo que creen. Ciertamente que habito en los Cielos de la luz, del poder, del amor, de la sabiduría, de la justicia, de la felicidad, de la perfección. Yo estoy más allá, sí; pero más allá del pecado humano, mas allá del materialismo, de la soberbia, de la ignorancia.
Si me buscáis en cuanto os rodea en la Tierra, en el aire, en el espacio, en la luz, en los mares, en los valles, en el sol, en las estrellas, en el universo, en los desiertos. Dentro de vosotros mismos, ahí me veréis. Si buscáis mi presencia en la más insignificante criatura, en la hoja del árbol que mueve la brisa o en el perfume de las flores. ahi me encontrareis, ahí descubriréis la huella del amor con que el Creador rubrica todas su obras.
Ved cómo ese Dios que los hombres se han forjado distante, inaccesible, misterioso e incomprensible, desaparecerá para que en su lugar surja el Dios verdadero, cuyo corazón está eternamente abierto para sus hijos, presente en todo sitio y en todo instante. Por lo tanto, nadie se averguence de llamar Padre a Dios, al Creador, porque ese es su verdadero nombre.
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