HUMANIDAD
Parte 19



La virtud y el poder de la oración espiritual para evitar tanta maldad y dolor


Muchas veces he sorprendido a los hombres, preguntándose, si no habrá alguna forma de hablar con Dios, para pedirle y suplicarle su ayuda, para evitar tanta maldad, dolor, injusticia y amargura. En su angustia y desesperación, quebrantan su entendimiento, por no encontrar la respuesta tan esperada. Se sienten impotentes para combatir este flagelo, que muchos pierden la fe, se sienten defraudados, ya nada esperan, y se creen abandonados por su Dios, de quien se recibe éste castigo según ellos.

Es necesario que comprendáis que de Dios, no puede brotar el menor castigo para la humanidad, el mal existente, es consecuencia de las malas obras de los hombres. De su alejamiento del verdadero Dios, por lo tanto es natural que todo lo que se ha sembrado mal a través de los tiempos, hoy tenga peores resultados.

Yo os digo: en vosotros está el evitar tanto dolor, empleando el arma más poderosa que tenéis y que es la verdadera oración espiritual, aquella que no sólo brota de vuestros labios, sino de lo mas profundo del espíritu, pero os habéis alejado tanto de la fuente divina, que hasta este idioma os parece desconocido y extraño. Aprended ese lenguaje, para que, a la vez que me habléis, sepáis escucharme.

En la oración hallaréis consuelo, inspiración y fuerza, ella os dará la dulce satisfacción de poder hablar íntimamente con Dios, sin testigos ni mediadores; Dios y vuestro espíritu, reunidos en ese dulce momento de confidencias, de comunicación espiritual y de bendiciones. Ese estado de elevación, no puede ser privilegio tan sólo de algunos seres, es un don que está latente en todo espíritu, sólo es necesario que lo descubráis y que lo desarrolléis

Comprended cuánto bien podéis y debéis de hacer con vuestros sanos y nobles pensamientos, convertidos en oración, en medio de este caos que ha envuelto a la humanidad. Estáis en un mundo de pensamientos e ideas encontradas, donde las pasiones palpitan y los odios chocan, donde las mentes perturbadas por el materialismo y las bajas pasiones, hacen que la humanidad navegue entre tinieblas.

Orad con una fe tan grande, que supere el odio, la amargura y el dolor de este mundo. Si toda la humanidad, se uniera en verdadera oración, a cualquier hora y en cualquier lugar, se crearía una fuerza tan grande y hermosa que destruirá todas las malas vibraciones producidas por insanos y turbados pensamientos. Esa fe en vuestra oración llegará al espíritu y pensamiento de muchos y hará que se desistan de insanos propósitos, y que quienes desean quitarse la vida, se abstengan de hacerlo

Orad en cualquier lugar en que os encontréis. En el seno de vuestro hogar, o donde labráis el pan de cada día, o dentro de la inquietante ciudad. Yo solo os pido que me busquéis en el interior de vuestro santuario universal.

En la oración encontraréis la forma de prevenir un peligro, de resolver un problema, de solucionar una confusión. Ya veréis que después de practicar la verdadera oración, os sentiréis mas inclinados a hacer el bien. Por eso os digo que me busquéis en todas las formas en que me necesitéis, ya sea como Dios; como Padre, como Maestro, como hermano, como amigo, como doctor. La oración es escudo y arma, si tenéis enemigos, con la oración os defenderéis, pero sabed utilizad esta arma, porque no debéis herir ni lastimar a nadie, porque su única mi-sión, es brillar entre las tinieblas. El que ora, no teme a los abismos, o escollos, su espíritu siempre está sereno.

La oración del espíritu es tan profunda, que está más allá de las potencias y de los sentidos humanos. Utilizadla tanto para remediar una necesidad espiritual, como para pedir la solución de una aflicción material.

Breve análisis del tema



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